Aunque quizás el cuerpo del actor de 49 años está pagando las consecuencias de una vida de excesos, parece que en esta ocasión sus vicios no fueron la causa de su padecimiento.
Charlie Sheen vio mermada su salud el día de ayer por culpa de una intoxicación alimenticia, o por lo menos así lo anunciaron sus representantes a US Weekly:
“La comida le ha sentado mal, pidió almejas que estaban en mal estado. Le hicieron unas pruebas, le hidrataron y a los 90 minutos estaba de nuevo en su cama.”
El actor tuvo que visitar el hospital por culpa de unos dolores muy agudos en el pecho, y una fuerte deshidratación. Sin embargo, varios medios estadounidenses ponen en duda esta versión por dos razones: la primera, los antecedentes de la vida llena de escándalos que Sheen ha llevado. La segunda, que la llamada que realizaron sus acompañantes no fue al 911, sino al departamento de bomberos, quizás para evitar que la conversación fuera grabada.
Pero sea como sea, el gran Charlie ya está a salvo y puede seguir pasándola en grande:
