El presentador cumplió con su palabra.
Tras el escándalo de corrupción que ha rodeado a la FIFA en las últimas semanas, John Oliver aprovechó su programa para pedirle a los patrocinadores del organismo que por favor ejercieran alguna clase de presión para que Joseph Blatter renunciara a su cargo.
Estas eran sus promesas, de llegar a suceder:
Realizar el programa calzando uno de los modelos más pomposos de ADIDAS…
Comerse uno de los menús de un dolar de McDonald’s…
Y por supuesto, tomarse una cerveza Budweiser de limón.
Es por eso que, después de la repentina renuncia de Blatter el martes pasado, a Oliver no le quedó más opción que cumplir sus promesas, y esto fue lo que pasó:
Vía Sopitas.
