Junto al cantante jamaiquino Skip Marley con el que aprovechó la oportunidad para protestar contra Trump.
Con un nuevo look, Katy Perry debutó en pantalla su nuevo sencillo Chained to the Rhythm, el cual estrenó la semana pasada junto a un videoclip. El escenario fue transformado en una especie de casa rodeada de cercas que constantemente cambiaban su tamaño y distribución conforme la artista caminaba a su alrededor.
En su presentación, Perry estuvo acompañada de su colaborador Skip Marley con quien terminó juntando las manos para recordar la constitución de los Estados Unidos y protestar ante las recientes medidas que ha tomado su presidente Donald Trump.
Mira todo el momento acá: