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Dudamel: “debemos convertir el arte en un elemento de inclusión”

El director de la Filarmónica de Los Ángeles y la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, Gustavo Dudamel, que hoy inicia una gira por EE.UU., dijo a Efe que el arte debe ser “un elemento de inclusión” social y no un “lujo”.

“No podemos ver el arte como algo separado de la sociedad y especialmente en el caso de la música, debe ser parte fundamental (…) debemos convertir el arte en un elemento de inclusión” social, aseguró el maestro de 31 años en una entrevista telefónica.

Para Dudamel, el acceso al arte es sinónimo de “acceso a la belleza, a la sensibilidad” y, por lo tanto, “no debe ser un lujo” para el ciudadano de a pie.

En el caso de Venezuela no hay mejor ejemplo que el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles, fundado en 1975 por el maestro José Antonio Abreu y que ha facilitado la inclusión social de los jóvenes, señaló.

Dudamel ha copiado ese exitoso modelo de formación musical en la Orquesta Juvenil de Los Ángeles (YOLA, en inglés), que ofrece música a niños en barrios pobres, una experiencia que “ha sido una maravilla”.

Respecto a la gira que emprende hoy de costa a costa de Estados Unidos, el conductor de Barquisimeto se manifestó “emocionado” por compartir “el poder y la magia” de la música de compositores latinoamericanos “en escenarios donde no se han escuchado”.

“Estamos trayendo nuestra música para que muchos jóvenes, muchas personas latinas en EE.UU. vean lo rica que es nuestra cultura”, explicó el director musical, que vive a caballo entre Caracas y California con su esposa e hijo.

El periplo incluye paradas en San Francisco (California), Chicago (Illinois), Washington, Filadelfia (Pensilvania) y Nueva York.

Al igual que en sus dos giras anteriores por Estados Unidos con la Sinfónica, las entradas están agotadas en todos los escenarios, incluyendo el Centro Kennedy para las Artes Escénicas en Washington y el Carnegie Hall en la Gran Manzana.

El repertorio incluirá obras como Sinfonía India, del mexicano Carlos Chávez; Tres versiones sinfónicas, del español Julián Orbón; La noche de los Mayas, del mexicano Silvestre Revueltas; Rituales Amerindios II- Chaac, del argentino Esteban Benzecry; Choros Nº 10, del brasileño Heitor Villa-Lobos; Sinfonía Alpina, del alemán Richard Strauss, y Cantata Criolla, del venezolano Antonio Estévez.

En el Carnegie Hall, la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar ofrecerá un concierto de música de cámara con obras del cubano Gonzalo Rubalcaba, el panameño Danilo Pérez, el mexicano Enrico Chapela y Benzecry, todas obras encargadas para la ocasión.

En Nueva York, Dudamel recibirá el premio de “Músico del año 2013” de la organización Musical América y Abreu, el de “Educador del año”. Ambos son considerados los músicos académicos de Latinoamérica más premiados en los últimos cinco años.

“Creo que es un reconocimiento a todo ese trabajo, a esos sueños que el maestro Abreu ha inculcado y desarrollado. Los niños están construyendo sus sueños y sus vidas a través de la música, y este premio es para ellos”, subrayó.

Aunque su pasión es la música, Dudamel no es ajeno al debate en el Congreso de EE.UU. sobre el temido “precipicio fiscal” que, de no resolverse, pondría en peligro fondos para programas de educación artística extracurriculares.

“Mucha gente puede decir que del arte no se vive, que del arte no se come. Pero les mostraría (a los legisladores) cómo estos niños de estas orquestas, años más tarde, se convierten en líderes y cambian su vida, la de sus familias y la comunidad (…) estamos hablando de algo que no es una utopía, es algo fundamental”, puntualizó Dudamel.

 

Fuente: EFE