Ocurrió el fin de semana durante un concierto en San Diego.
Una vez más, los enérgicos fanáticos de Taylor Swift hicieron de las suyas. ¿Quién fue esta vez? Un individuo de 26 años llamado Christian Ewing que se subió de alguna forma al escenario (con intenciones, hasta los momentos, desconocidas) y fue detenido por los guardias de seguridad.
El problema es que los agentes subestimaron las capacidades del desconocido, y mientras la intérprete de ‘Bad Blood’ proseguía con su concierto, una pelea se desarrolló a sus espaldas.
De acuerdo a TMZ (vía NME), Ewing terminó con las costillas rotas. Todo el incidente quedó capturado en video, y lo puedes ver acá: