Travis Barker, baterista de blink-182, ha culpado de mala praxis a los médicos que lo atendieron tras su accidente automovilístico y los ha responsabilizado por sus constantes problemas de salud, afirma TMZ.
Barker ha demandado a los doctores del Medical Imaging Center en Santa Monica, California alegando negligencia ya que, según el baterista, debía ser sedado antes del procedimiento, pero los técnicos no pudieron encontrar una vena y lo clavaron al menos 40 veces en los brazos con una aguja sucia, lo que le causó daño a los nervios y desarrolló una infección por estafilococos.
Recordemos que Barker estuvo involucrado en un desagradable accidente automovilístico en julio cuando su camioneta colisionó con un autobús escolar. Desde el accidente, Barker ha estado imposibilitado de tocar la batería, lo que ha obligado a blink-182 ha cancelar más de una presentación.
El baterista, de 42 años, también ha demandado al conductor del autobús escolar que lo arrollo el pasado julio. Estaremos atento a cómo se desarrolla esta querella.