La atracción se ha vuelto sensación en el país asiático.
La muerte y el renacimiento siempre han sido tópicos de polémicas, sea por razones religiosas o por la poca sensación de veracidad que da. En China se presentó una nueva atracción que ha ido ganando atención por simular la muerte, cremación y resurrección.
El simulador de nombre Xinglai consta de sesiones de dos horas cuatro veces a la semana donde los participantes se sientan en un cuarto y deciden quién debe morir, uno por uno. Después de que alguien es seleccionado, el sujeto ingresa a un cuarto oscuro y espera a ser “cremado”. Tras esto, atraviesa un canal de nacimiento para renacer.
Acá puedes ver un pequeño vídeo: