La estrella habló el pasado mes de abril con la revista People y confesó que llevaba cinco meses confinada a su cama.
En su primera aparición pública después de haber sido diagnosticada con la enfermedad de Lyme, la cantante Avril Lavigne habló en Good Morning America sobre su ‘segunda oportunidad en la vida’ y sobre la lucha constante que la obligó a detener su carrera, su gira mundial, y el resto de sus compromisos profesionales.
Lavigne empezó a experimentar los síntomas en octubre del año pasado, poco después de cumplir los treinta: en vez de celebrar, se sintió cansada y somnolienta. Al asistir a los especialistas para obtener un diagnóstico, ninguno la tomó demasiado en serio: argumentaron que sus síntomas se debían a una fatiga crónica o depresión.
‘Esto es lo que le hacen a un montón de personas que tienen la enfermedad de Lyme,’ dijo. ‘No tienen una respuesta, y te dicen que estás loco.’
Al recordar los difíciles momentos, Lavigne no pudo evitar soltar unas cuantas lágrimas, que se incrementaron al recordar lo sola que se sintió y lo mucho que sus fans le dieron fuerzas para seguir adelante.
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