Ya concluyeron las averigüaciones sobre el lamentable asesinato de la modelo venezolana Ángela Medina Valles, que perdió la vida a apenas 22 años de edad.
El que era su novio, David Ramírez, confesó haber asesinado a Medina.
Según reseña el diario El Nacional, el comisario Juan Carmona, jefe de la Delegación Lara de ese cuerpo, presentó en rueda de prensa a los supuestos implicados en el crimen.
Junto al novio de la víctima, David Emiliano Ramírez Salazar, de 21 años de edad, apresaron a otros dos hombres, que responden a los nombres de Yohalber González, de 28 años de edad y Víctor Marín Córdoba (productor artístico) y Mauricio Bastidas, de 37 años y 40 años de edad, respectivamente.
Ramírez, quien se dedicaba al canto, fue apresado en la morgue de la capital larense. Allí lloró mientras esperaba que retiraran el cadáver de la modelo. Lo llamaron a declarar y al haber inconsistencias en su testimonio lo presionaron hasta que admitió su responsabilidad en el hecho.
A Medina la asfixiaron con una almohada en su propia vivienda. Posteriormente los tres acompañantes de Ramírez cooperaron para ocultar y trasladar el cadáver al lugar donde finalmente fue encontrado. En el proceso intentaron quemarlo para dificultar las labores de identificación.
A los detenidos les incautaron cuatro teléfonos celulares y una tarjeta de débito perteneciente a la modelo con la que hicieron un consumo por 830 bolívares en una red de farmacias el martes en la noche.
Luego de comparecer ante el Tribunal 10° de Control de Barquisimeto, los cuatro detenidos fueron trasladados a la cárcel de Uribana.
Así sonó la primera, y por lo visto, última canción de Ramírez:
