Lo que parecía imposible sucedió en una de las últimas emisiones del programa.
Hasta Simon Cowell tiene un lado blando a pesar de su usual actitud desinteresada, y gracias a una emotiva interpretación en ‘The X-Factor’ el mundo pudo verlo por primera vez.
Josh Daniels, de 21 años, fue el último participante de la noche, y decidió audicionar con ‘Jealous’, de Labrinth, una elección que estuvo inspirada en la muerte de su mejor amigo, en el 2013. Las letras, su calidad vocal, y los matices de su interpretación no solo le valieron el paso a la siguiente ronda, sino que además hicieron llorar a Cowell.
De acuerdo a Hello, el quiebre emotivo estuvo propiciado por la muerte Julie Cowell, la madre del juez, el pasado mes de julio.
De cualquier manera, Cowell cerró con su característico ‘Son tres SÍ’ y lo envió a Daniels a la siguiente ronda. A continuación, puedes ver todo lo que ocurrió: