La revista musical Rolling Stone, en su versión España, publicó 10 hechos sobre el místico músico, Rodriguez, centro de atención del documental ganador del Oscar, “Searching For Sugar Man”.
El documental es una pieza obligatoria para los amantes de la música, así que invitamos a todos a verlo. Que este top sirva para motivar al que no conoce a Rodriguez y para entretener al que ya lo conoce.
1. Se saltó la ceremonia de los Oscar. Estaba dormido cuando ganó
El director de Searching for Sugar Man, Malik Bendjelloul, imploró a Rodriguez asistiera a los Oscar, pero el se negó ya que sentía que él se llevaría la atención que merecían los realizadores. “Además, nosotros acabábamos de volver de Sudáfrica y estaba cansado”, cuenta el músico. “Estaba dormido cuando ganó, pero mi hija Sandra me llamó para contarme. No tengo tele de todas formas”.
2. Australia le descubrió antes que Sudáfrica
Un puñado de copias del debut de Rodriguez, Cold Fact (1970), llegó a Australia meses después de que el disco fracasara en EE UU. Uno acabó en las manos del dj de radio australiano Holger Brockman, quien empezó a pinchar Sugar man, en la emisora donde trabaja en Sydney. Las tiendas de discos empezaron a vender copias por más de 250 euros, y finalmente la discográfica Goose records lo distribuyó a lo grande por todo el continente. “Todos mis amigos tenían una copia de Cold fact”, cuenta el baterista de Midnight Oil Rob Hirst. “Tocábamos The wild, the innocent & the E street suffle, de Bruce Springsteen, el primer álbum de Billy Joel y Cold fact”.
3. Ahora mismo se está forrando en billete
El redescubrimiento de Rodriguez por los sudafricanos en 1998 le permitió retirarse del negocio de la construcción. Él regresó al país cada par de años, y también comenzó a dar algunos conciertos por Europa. Cold fact se editó en cd y poco a poco empezó a encontrar su público a través del continente, aunque el éxito en su país de origen se le seguía resistiendo. Pero Searching for Sugar Man cambió todo eso, dándole a Rodriguez un nivel de fama inconmensurable. Hace algo menos de un año, estaba tocando en un Pub de Nueva York para menos de 200 personas. Pronto, evolucionó al Highline Ballroom, de 700 asientos, conciertos en el Town Hall (con capacidad para 1.500), el teatro Bacon (2.900) y el Radio City Music Hall (6.000 butacas), todos vendidos en minutos. Acaba de cerrar un concierto en el Barclays Center de Brooklyn con capacidad para 18 mil personas.
4. …Y está donando la mayoría
Rodriguez ha vivido en la misma modesta casa de Detroit los últimos 40 años. No tiene coche, ordenador o ni siquiera televisión. Su hija Regan le obligó a que tuviera un móvil hace un par de años, porque se cansó de dar vueltas con el coche por su barrio buscándole. “Lleva una vida muy espartana”, dice Regan. “Casi me atrevería a llamarla de amish. Él me dijo una vez que había tres necesidades básicas: comida, ropa y cobijo. Una vez que llegas a ese nivel, todo lo demás es una capa de adorno”.
5. Casi fue a la guerra de Vietnam
A pesar de ser un pacifista, Rodriguez se planteó alistarse en el ejército en la cumbre de la guerra de Vietnam. “Era el espíritu de aquella época”, dice. “Tienen una guerra cada 15 o 20 años, y siempre hay una cosecha de jóvenes que no sabe lo que está pasando, que han sido inspirados por los medios de comunicación. Amo a mi país. Es sólo el gobierno en el que no creo”. Al final no se alistó. “Me peleé dos veces con mi hermano por este tema”, cuenta, “además, me acaba de casar y por aquel entonces no aceptaban a gente que estuviera casada”.
6. Publicó un single en 1967 bajo el nombre Rod Riguez
En 1967, Rodriguez estaba trabajando en una fábrica de coches y rocando en los cafés y bares de Detroit por la noche. El productor local Harry Balk vió una de sus actuaciones y grabó su tema I’ll slip away, con Impact Records. (Destpués se regrabó en la sesiones de Coming from reality). Balk cambió su nombre a Rod Riguez. “Fue su decisión”, dice Rodriguez aún con una mueca de vergüenza ante el recuerdo de ver su nombre encubierto. “Él pensó que sería más atractivo”.
7. En un principio rechazó aparecer en Searching for Sugar Man
La primera vez que el realizador sueco Malik Bendjelloul escuchó algo de Rodriguez fue viajando por África. Originalmente, pensaba crear un corto para la televisión sueca, pero el proyecto empezó a crecer lentamente hasta convertirse en filme. Decidió contar la historia desde la perspectiva de los fans sudafricanos. “Por qué todo el mundo pensó que Ciudadano Kane era una película fantástica?”, pregunta. “Es porque era muy inteligente. No contaba la historia de este tipo rico. Contaba la historia de un periodista que estaba intentando contar la historia de un tipo rico. Eso fue lo que enganchó en un principio, que esta historia sería diferente”. Sólo había un problema: Rodriguez era muy reacio a aparecer en la película. “Sus hijos me dijeron que probablemente prodría conocerle, pero que no me hiciera ilusiones sobre hacer una entrevista”, explica Bendjelloul. “Fui a Detroit una vez al año, durante cuatro. No accedió a ser entrevistado hasta mi tercera visita. Creo que sólo cambió de opinión porque le dimos pena. Vio lo duro que estábamos trabajando y pensó, ‘será mejor que ayude a estos chicos”.
8. Se está quedando ciego
Rodriguez sufre un glaucoma y su visión es muy limitada. Como consecuencia, se mueve muy despacio cuando anda y normalmente está agarrando el brazo de alguien. “Todavía puedo distinguir algunas personas en el público, en mis conciertos”, dice. “Es una condición que se puede tratar, pero un diagnóstico temprano es muy importante. Todavía me apaño yo solo, pero me lo tomo con mucha calma”. Se define como un “hombre de 70 años en forma”, y a su familia le inquieta el peaje físico de viajar tanto. “Siempre me preocupo por él, y su salud es una de mis principales preocupaciones”, dice su hija Regan. “Le reservamos asiento en primera clase en los vuelos y hacemos todo lo posible para que sea lo más cómodo para él”.
9. Tiene bandas de apoyo por todo el mundo
Al igual que Chuck Berry, Rodriguez viaja sin una banda regular. “Me gusta decir que hago versiones de mis propias canciones”, apunta. “Y tengo como unas doce bandas por todo el mundo. Y no es una exageración. Tengo una sudafricana, australina, suecas, inglesas, americanas. Y son músicos notables, además”. En su último tour por Australia le acompaño Break, que cuenta con antiguos miembros de Midnight Oil. “Su hija Regan me llamó y nos dio una lista de canciones para ensayar”, explica Rob Hirst, baterista de Break. “Ensayamos un par de horas cuando llega a la ciudad. Pero no le gusta ensayar, así que en las primeras veces improvisamos bastante”.
10. Está trabajando en su esperado tercer álbum
Rodriguez sólo tiene dos álbumes: Cold fact (1970) y Coming from reality (1971). Su prioridad ahora mismo es ir de gira, pero también está empezando a trabajar en canciones nuevas. “Tengo muchos títulos y temas en los que he estado trabajando”, desvela. “Toqué con una orquesta en el programa de David Letterman recientemente. Después de hacer eso sé que puedo ir a por el álbum”. Su hija espera que lleve el proyecto hasta el final. “Soy muy optimista con ese tema”, dice. “Si me hubieras preguntado en el pasado te hubiera dicho que no. Pero ha estado hablando mucho de ello últimamente. Estamos más cerca, pero no vendamos la piel del oso antes de cazarlo”.
Fuente: RollingStone.es