Tras la catastrófica entrega al Oscar por Mejor Película en la edición del año pasado de los Premios de la Academia, donde le otorgaron el premio por equivocación a La La Land en vez de a Moonlight, por fin Barry Jenkins ha tenido la oportunidad de dar su discurso de aceptación.
Tuvo que pasar un año completo antes de que Barry Jenkins, director de Moonlight, pudiera dar su discurso de aceptación, y ya que la temporada de premios ha llegado a su fin, el cineasta aprovechó el SXSW en Austin para recitar las palabras del discurso que no pudo dar en su debido momento.
El escritor de Moonlight, Tarell Alvin McCraney, y yo somos Chiron. Somos ese chico, y cuando ves Moonlight, no asumes que un chico, que creció como y donde creció, crezca y haga una obra de arte que gane un Premio de la Academia. Ciertamente no crees que crecerá para ganar la Mejor Película. He dicho eso mucho, y lo que tuve que admitir es que yo mismo me puse esas limitaciones. Me negué a mí mismo ese sueño. No tú ni nadie más. Yo. Y para cualquiera que mire esto, que se vea en nosotros, que esto sea un símbolo, un reflejo que lo lleve a amarse a sí mismo porque hacerlo puede ser la diferencia entre soñar y de alguna manera, a través de la gracia de la Academia, realizar sueños que nunca ha permitido tener.
Qué lástima que Barry Jenkins no tuvo la oportunidad de pronunciar este emotivo discurso en un escenario frente a una audiencia cautiva. Por desgracia, así es como se desarrollaron las cosas, ya que a los presentadores de la Mejor Película, Warren Beatty y Faye Dunaway, se les entregó el sobre equivocado (el que contenía la tarjeta para la victoria de Mejor Actriz de Emma Stone por La La Land).
A pesar de la catástrofe ocurrida, las declaraciones de Barry Jenkins en SXSW (a través de CNN) resaltan su felicidad al ganar el Oscar a la mejor película. Y este episodio no ha disminuyó sus esfuerzos cinematográficos, por el contrario, ya está en el proceso de trabajar en su próximo proyecto, If Beale Street Could Talk, que se basa en la novela homónima de James Baldwin de 1974. Ahora que ha demostrado que puede ganar un Oscar, será interesante ver cómo procede como veterano de la Academia.
Si no viste esta cinta ganadora a Mejor Película en la edición 89º de los Oscar, acá te dejamos el tráiler: