A comienzos del 2013 se popularizó en Internet un show llamado ‘7 mujeres, 1 destino’. No se trataba de una nueva novela, ni un programa convencional de concursos. Se trataba del primer reality show porno de Venezuela.
[Advertencia: Contenido adulto]
Por: Manuel Ángel Redondo / @ManuelAngel
Lo que comenzó como un proyecto ambicioso, rápidamente cayó en una espiral de engaños, litigios legales y peleas 2.0. Pero vamos por el principio:
En el 2012 se dio a conocer a través de redes sociales y websites de contenido adulto, el llamado a un casting para lo que sería el primer reality show porno de Latinoamérica. Se llamaría ‘7 mujeres y un destino’ y sería una producción colombo venezolana que transmitirían varios canales por cable, además de las páginas www.rockmebabetv.com y www.7mujeres1destino.com, hoy día ambas fuera de servicio, pero que en su momento ofrecían hasta diversos paquetes para descargar videos del show.
El concepto del programa era sumamente sencillo: un “Director” que no revelaba su identidad era el encargado de probar a las siete participantes del programa en sesiones de fotos, retos subidos de tonos y en la cama, teniendo sexo con ellas y documentando en video lo sucedido. Todo esto, combinado con entrevistas a las chicas, tras cámaras de los encuentros sexuales o cuando se cambiaban de ropa y demás. La ganadora recibiría 7mil dólares y un contrato de un año con la productora.
Ya en 2013, comenzaron a estrenarse paulatinamente los episodios:
No pasó mucho tiempo antes que el programa se viralizara en la web y protagonizara las búsquedas de muchos en Google, páginas porno o foros de Internet, que trataban de indagar más en el reality, sus chicas y sus capítulos.
Sin embargo, con el éxito, también llegaron los problemas. Primero, algunas participantes comenzaron a anunciar su salida del show a través de Twitter. Unas alegaban razones personales mientras que otras fueron más lejos: Dayalicius y Samara Moskova comenzaron una campaña de desprestigio contra el programa alegando falta de pagos e inconsistencias en el contrato que firmaron para participar. La polémica llegó a Youtube, donde ambas chicas no sólo detallaron los problemas que vivieron con el show, sino que también revelaron la identidad del “Director” y creador del programa: Dorian Ortiz, un fotógrafo y videógrafo especializado en contenido erótico.
Una vez que comenzaron los inconvenientes, los videos comenzaron a escasear, al igual que las informaciones sobre el show en la red. De hecho, el útlimo tuit que envió la cuenta oficial del programa @7mujeres1destin, fue el 5 de abril de 2013.
Actualmente, sólo se consiguen los primeros 5 episodios del programa en Internet y se desconoce por completo si se llegaron a publicar o grabar más en su momento.
Hoy día, ‘7 mujeres, 1 destino’ es considerado casi que un show de culto en la pornografía venezolana, que a pesar de no ser una industria grande, existe, trabajando bajo perfil y en Internet. Si no, al menos es una curiosa anécdota dentro del erotismo y cultura pop de nuestro país.