El site español Fotogramas publicó un interesante artículo sobre la carrera del cineasta norteamericano Quentin Tarantino.
Firmada por Noel Ceballos, la nota repasa varias de las polémicas declaraciones y promesas que ha hecho en algún momento Tarantino, para luego olvidarlas y no cumplirlas. Dejamos el artículo a continuación (su versión original, en este enlace).
Breve historia de las promesas incumplidas de Quentin Tarantino
El director acaba de anunciar su intención de retirarse tras rodar diez películas. “No está escrito en piedra”, matiza, “pero ese es el plan”. ¿Tienen sus fans razones para desesperarse? Si tiramos de hemeroteca, parece que no demasiadas: QT tiene ya un largo historial de rumores no cristalizados y declaraciones sin mucha base real. Repasamos los diez más interesantes.
1. Kill Bill 3
No es una noticia nueva, sino que Tarantino lleva avivando este fuego desde el estreno de la segunda parte, allá por 2004. De hecho, la semilla de una posible continuación está presente en los primeros minutos de ‘Kill Bill’: tras matar a Vernita Green en la cocina de su casa, La Novia se encuentra con su hija. Conocedora de los mecanismos psicológicos que activa la sed de venganza, nuestra heroína le da una pequeña charla a la niña: tiene su permiso para buscarla cuando crezca. Ella la estará esperando. Por aquel entonces, QT se refería a ‘Kill Bill’ como su Triliogía del Dólar particular, pero necesitaba esperar a que las actrices envejecieran unos diez o quince años en la vida real.
El plan ha ido cambiando un poco con el paso del tiempo: en 2007, Tarantino empezó a lanzar rumores sobre dos secuelas en formato anime, o un posible spin-off sobre dos ex-miembros mutilados de los Crazy 88 que buscan (lo has adivinado) venganza. Parece que todas las entrevistas que ha concedido desde entonces tienen que tener obligatoriamente una pregunta sobre la continuidad de ‘Kill Bill’, pero las respuestas varían de manera drástica: desde un pues-claro-que-sí hasta un prefiero-concentrarme-en-proyectos-originales. Depende de cómo se haya despertado Tarantino esa mañana.
2. Una película de gángsters estilo años 30
En un mundo pre-‘Gangster Squad’, Quentin Tarantino expresó sus deseos de rodar un homenaje al cine de gángsters que Warner Bros. popularizó en la década de los 30. La primera vez fue en 2009, cuando habló de “re-imaginar” los códigos de las películas anteriores al Código Hays, donde todo eran automáticas, prostitutas, cocaína, promiscuidad, desnudos parciales, argumentos recién pescados de la crónica de sucesos y violencia en los bajos fondos. La idea de Christoph Waltz canalizando a su mejor Edward G. Robinson es atractiva, pero no hemos vuelto a escuchar nada al respecto.
3. Los hermanos Vega
Puede que sea su proyecto quimérico más largamente acariciado. Los fans más enciclopedistas del Universo QT ya sabrán que el Vincent Vega de ‘Pulp Fiction’ y el Vic Vega (o Señor Rubio) de ‘Reservoir Dogs’ son, de hecho, hermanos. ¿Por qué no una película en la que podamos verlos unidos de manera fraternal y, posiblemente, homicida? Bueno, hay un problema: tendría que ser una precuela, por razones bastante obvias. Durante mucho tiempo, Tarantino contempló la posibilidad de un guión (con ‘Double V Vega’ como posible título) sobre una visita de Vic a Vincent durante su estancia en Amsterdam, pero el tiempo no jugaba precisamente a su favor. Ahora John Travolta y Michael Madsen no están precisamente para precuelas, aunque el segundo ha declarado en alguna ocasión que la edad no tiene por qué ser un factor determinante: ¿y si Vic y Vincent tuvieran dos hermanos gemelos aún vivos? Eh, claro…
4. Una Wuxia de la Shaw Brothers
El cineasta salió de ‘Kill Bill’ con tal subidón por las artes marciales que exclamó a los cuatro vientos sus planes para rodar una película cien por cien Shaw Brothers. Esta vez no se limitaría a usar el logotipo del estudio a modo de homenaje, sino que pretendía rodar una wuxia (palabra china para definir el género de las patadas voladoras como panes) que podría considerarse como parte del cánon dorado de la Shaw, una suerte de secuela espiritual de ‘Five Deadly Venoms’ (1978) en la que no se hablase una palabra en inglés. Tenemos la sensación de que la idea no ha abandonado del todo el cerebro de QT, pero (de momento) habrá que esperar.
5. James Bond
Nuestro hombre es uno de esos entusiastas de 007 que realmente vibraron con Pierce Brosnan, hasta el punto de reunirse con él para tantear una adaptación de ‘Casino Royale’, la primera novela de Ian Fleming sobre el personaje. La estrella estaba dispuesta a volver a la saga tras ‘Muere otro día’ sólo para poder trabajar con Tarantino, pero los Broccoli fueron categóricos: es imposible rodar esa novela. ¿Reacción de QT cuando los productores rodaron exactamente esa novela como reboot de la franquicia en 2006? Furia. Furia nivel: la pantalla se vuelve roja y hacemos zoom en sus ojos mientras suena la canción de ‘Ironside’. “Dijeron que era inadaptable, pero después yo hablé un poco sobre ella y el gran bombazo en Internet fue que eso era lo que los fans querían ver. Así que pensaron que quizá no fuera tan inadaptable”.
6. Un documental sobre Harvey Weinstein
Su bromance con el co-fundador de Miramax, guerrero de la temporada de Oscar e hijo predilecto de Sundance no es ningún secreto. Los hermanos Weinstein son sus patrones en Hollywood, así que es posible que el estreno de ‘Unauthorized: The Harvey Weinstein Project’ le llevase a pensar que él también podía hacer algo así con su lado de la historia. Su publicista afirmó que QT estaba considerando seriamente una pequeña excursión al género de no ficción, pero puede que se guarde todas esas vivencias para sus planes de jubilación: ya ha aseverado en varias ocasiones que su vida cuando deje de dirigir consistirá en estudiar y escribir sobre la historia del cine a tiempo completo.
7. Tax Driver 2
Su lista de películas favoritas de todos los tiempos es tan voluble como los romances imaginarios de un colegial, pero ‘Taxi Driver’ suele ser una constante. Durante la promoción de ‘Malditos bastardos’, Tarantino dejó caer que le gustaría encargarse de una suerte de secuela o remake de la película de Martin Scorsese. Y poco más. Es uno de los rumores más fantasmales de toda su larga trayectoria: de hecho, puede que naciese y muriese dentro de esa misma entrevista.
8. Modesty Blaise
Es la lectura preferida de Vincent Vega cuando va al servicio, pero también fue (durante un tiempo) uno de los posibles proyectos de QT. Creada por Peter O’Donnell y Jim Holdaway en 1963, esta asesina/detective/líder de una organización criminal/superheroína con pasado oscuro parece la inspiración de ese piloto que Mia Wallace discute durante la cena en ‘Pulp Fiction’, amén de una de las posibles madres creativas de La Novia. Es decir, que la tira ya forma parte fundamental, de alguna manera, del corpus tarantiniano. Aún así, los Weinstein decidieron comprar el personaje a sus creadores sólo por si acaso, una decisión que les dio un quebradero de cabeza en forma de producción directa a dvd: ‘My Name Is Modesty’, rodada durante tres semanas en 2004 como artimaña para mantener los derechos. QT actuó nominalmente como productor ejecutivo.
9. Luke Cage
En un panorama cinematográfico pre-Marvel Studios, incluso anterior a los ‘X-Men’ de Bryan Singer, un Tarantino aún principiante soñaba con adaptar al cine las aventuras del Héroe de Alquiler. Incluso llegó a reunirse con el productor que ostentaba los derechos del personaje por aquel entonces. Y, bueno, con su protagonista ideal: Lawrence Fishburne, a quien le encantó la idea. Todo iba sobre ruedas, pero entonces nuestro hombre tuvo una idea que iba a requerir toda su atención. Esa idea acabó siendo el guión de ‘Pulp Fiction’. ¿Alguna vez tuvo la tentación de volver a ese camino? Parece ser que no: aunque la posibilidad de hacer algo en el género de superhéroes no está del todo descartada, Tarantino asegura que prefiere crear un personaje original antes que adaptar una propiedad ajena.
10. Una pieza de Sexplotation
Si dejamos fuera ‘Death Proof’ y su embriagador halo erótico, el cine de Tarantino no se suele caracterizar por un exceso de secuencias picantes, sino más bien por lo contrario: el polvo automático de ‘Jackie Brown’ quizá fuera toda una declaración de intenciones sobre su aversión a mostrar sexo en pantalla. Según él, la razón es práctica: se siente mal al pedirle a sus intérpretes que se desnuden. ¡Pero! La cosa cambiaría si tuviera que rodar una película softcore al estilo de las guarradas italianas o alemanas de los 70, donde todo el mundo sabía a lo que venía.
En 2007, el director habló sobre la posibilidad de rodar una declinación abiertamente nudista de ‘Death Proof’: unas chicas norteamericanas van a visitar a unas amigas en Estocolmo, salen de bares, bailan, ligan, tienen sexo… Según él, el verdadero problema no sería exponerse y plasmar en pantalla las cosas que le ponen, sino hacer entrevistas posteriores sobre las cosas que le ponen y su plasmación en pantalla. Quizá el truco sería trabajar sobre las cosas que le pusieron a otro persona: a principios de la década pasada, el nombre de Tarantino apareció constantemente en los rumores sobre un remake de ‘Faster, Pussycat! Kill! Kill!’, la película más celebrada de Russ Meyer. Sin embargo, el hecho de que también se mencionase el nombre de Britney Spears coloca esto en la categoría de Rumores Loquísimos…
