The Weinstein Company continúa su distanciamiento del escándalo de asalto, acoso, abuso y explotación sexual del cofundador deshonrado, Harvey Weinstein.
A medida que los posibles compradores rodean al asediado distribuidor de películas, Weinstein Company está haciendo un esfuerzo conjunto para crear un espacio de trabajo más seguro e inclusivo para las mujeres. Y para finalmente cambiar su nombre contaminado.
Fuentes de The Wrap informan que mientras The Weinstein Company desocupa sus oficinas en Beverly Hills y posiblemente se mude a un lujoso espacio en el área Larchmont Village de Los Ángeles, la compañía creará un espacio de trabajo de oficina que acomodará mujeres, ofreciendo salas privadas de lactancia para nuevas mamás, tres comidas gratuitas por día y enfatizar un espacio de trabajo abierto. Esto sería un 180 de los “grandes santuarios privados” que los ejecutivos de Hollywood a menudo recibían.
Según los reportes, estos cambios estarán bajo la supervisión de la nueva potencial propietaria, Maria Contreras-Sweet, la ex jefa del departamento de Small Business Administration del gabinete del presidente Barack Obama.
Se informa que Contreras-Sweet está en conversaciones para comprar al distribuidor cinematográfico agobiado por la deuda (la cual aparentemente está por encima de los 350 millones de dólares) con un grupo de inversionistas por alrededor de 500 millones de dólares. Bajo Contreras-Sweet, la compañía estaría dirigida por una junta directiva y un equipo de inversionistas mayoritariamente femenino.
Contreras-Sweet también contribuirá con 20 millones de dólares para un “fondo de víctimas” que The Weinstein Company está estableciendo para las acusadoras de Harvey Weinstein.
Mientras tanto, la compañía todavía está en el proceso de cambiar su nombre manchado. Algunas compañías de mercadotecnia han sugerido los nombres de Wonder Hill (por la montaña en la que se encuentra el letrero de Hollywood), Assembly Hall o Creative Trade Studios como nuevos nombres.